Este es un día de agradecimiento a nuestros alumnos de cuarto grado de la escuela Juan José Paso por su promesa a la bandera. En ellos se renueva la esperanza de que una nueva generación de ciudadanos comprometidos con la Patria está emergiendo. Manteniendo los valores nacionales, como muchos de los aquí presentes hemos hecho, ustedes, quienes hoy se comprometen, representan la oportunidad nacional que está creciendo con nuevos conocimientos. Crecen con la alegría de tener a su alrededor la generosidad de quienes los aman y acompañan en su camino hacia adelante para alcanzar los sueños que se propongan. A ustedes, que serán nuestros próximos médicos, maestros, constructores, arquitectos, artesanos, músicos, deportistas, dondequiera que elijan estar en la sociedad, les pedimos que lleven con ustedes esta promesa que trasciende en el tiempo y engrandece a nuestra Argentina.

Muchos se preocupan por las grandes obras de infraestructura para la trascendencia, y en política piensan en inaugurar puentes y autopistas. Pero también en nuestra vida personal, a menudo pensamos que seremos reconocidos por lo material: tener el mejor auto, la casa más grande, la última moda en ropa o los teléfonos más modernos. Hace 204 años, el 20 de junio de 1820, Manuel Belgrano falleció con la dignidad de quienes lo dieron todo por la Patria. Murió en verdadera pobreza, pero rico en integridad y con el honor de haber sido un digno hijo de la Patria. Él ha trascendido todas las generaciones, y mientras exista un argentino en el mundo que lleve la celeste y blanca en el corazón, recordaremos al creador de nuestra bandera con honor y compromiso por nuestra nación.

Por lo tanto, debemos preguntarnos qué hacemos como ciudadanos para trascender y ser distinguidos. La respuesta está en nuestras acciones cotidianas: tratarnos con respeto, ser inclusivos en nuestros proyectos, estar aprendiendo permanentemente, hacer el bien, defender y construir una comunidad mejor con las herramientas que nos da la educación y el servicio. Sean coherentes con la promesa que hoy manifiestan, con los valores y la dignidad del General Manuel Belgrano.

Soy muy consciente de los problemas de nuestra sociedad, de las terribles dificultades que enfrentan las familias, del hambre de los pobres y la desesperación de quienes buscan trabajo. Sin embargo, veo en ustedes, alumnos de cuarto grado, la esperanza de un futuro mejor. Cuento con ustedes desde hoy para que nuestra comunidad, en su diversidad y abrazando a todos, sea cada día mejor. Pueden contar con este intendente y con el pueblo sanantoniense para alcanzar sus sueños de progreso y felicidad.

Es el amor y el honor a la Patria lo que nos une.